Cuando un diseño, por simple que sea, recibe un reconocimiento y sirve de identidad tanto para el indivíduo como para el colectivo, el minimalismo se convierte en toda una declaración de intenciones. Y es que lo casual nunca será un aval de diferencia, calidad o de “tener gusto”; no obstante, una adecuada elección de prendas y conjuntos, son los que hacen mella por su inmortalidad con respecto al paso del tiempo.

Hoy en WE ARE DOTORE, clasificaremos una serie de marcas y negocios de la capital guipuzcoana, con el fin de reconocer la selección textil que lleva años pululando por La Bella Easo.

Eran los años 90, y parecía que un nuevo mundo arrollaba el catastrofismo nuclear y las últimas diplomacias soviéticas; en el Reino Unido, se consolidaba un nuevo revival por la cultura pop británica y perfiles como Ray Davies, Paul Weller, Bernard Sumner o Johnny Marr, tendían puentes para conectar lo vintage con lo más moderno de aquel momento.

Cerca del núcleo donostiarra nacerían marcas como Batela o Loreak Mendian, con el objeto de responder a la cultura ochentera del flower-power, cubriendo así las necesidades más modernistas en su variedad de txamarras y chubasqueros.

Aquella abnegación a las firmas deportivas de la época (Karhu, Astore, Lotto, Kappa…) solo ingerirían en un amor por la búsqueda de la identidad y el equilibrio entre el saber vestir, saber estar y ser parte de los tiempos que corrían.

Y es que para comienzos de milenio, ya se notaba un discernimiento entre lo art y lo pop, donde franquicias como Cállate La Boca o Kukuxumusu pondrían de moda la vulgaridad estética, dejando un nicho que explotar a las nuevas corrientes del streetwear vasco.

En la siguiente clasificación, hemos decidido anteponer las marcas locales con un criterio cronológico, y las internacionales en función a la novedad que ha ido surgiendo en los comercios de Donosti.

LOCALES

Marcas de la zona que pese a no tener los recursos trabajan para ser una seña de nuestro pueblo.

Batela Ropa - 1991

Al son del “Leisure” de los Blur y próxima a las tendencias transatlánticas, Batela se formó en 1991 con el propósito de confeccionar prendas prácticas y de temática marítima, dejando presente su característico etiquetado con lenguaje de banderas. Su estética, si bien es moderna, está muy ligada al folclore de la costa vasca.

Loreak Mendian - 1995

La simpleza de su nombre cautivó a toda una generación de donostiarras que vistió una flor enorme en sus camisetas y jerséis; exacto, hablamos de Loreak Mendian. Cuando los hermanos Gallagher se consagraban con su “(What’s The Story) Morning Glory?”, la firma vasca se adentró en el mercado con ganas de apostar por un estilo icónico y que no se había visto hasta aquel entonces.

Tantä Rainwear - 2018

A finales de la década de los ‘10 y con el chico hypebeast como prototipo juvenil, surgió de la línea comercial de Batela la marca Tantä Rainwear, diseñada por la danesa Birgitte Jorgensen. A diferencia de los últimos productos de Batela, esta nueva marca se vió inspirada por el estilo de prendas como Rains, adaptando un corte más británico que se adecuaba a las precipitaciones de la ciudad de San Sebastián.

INTERNACIONALES

Firmas no tan conocidas que interfieren en la estética de nuestro pueblo como un fenómeno de lo alternativo.

Rains

Denmark rules, OK! A pesar de priorizar la gama de chubasqueros con una largura para combatir la lluvia, tienen una gama especializada en anoraks y smocks propios de la cultura militar que tan de moda están en la cultura casual gracias a marcas como Hawkwood Mercantile.

Rainkiss

AmsterDAMN! Ponchos oversize para la lluvia, con un toque estético a lo streetwear japonés.

Maium

Estos últimos también son de la capital neerlandesa. Sus chubasqueros poseen un tejido parecido al de Rains o Tanta, pero lo que los hace únicos es que a un lateral tienen una cremallera que se ajusta a la forma de la bici para la comodidad de su conducción.